La oxitocina es una hormona y neurotrasmisor clave para tener buena salud y vinculos seguros con quienes nos rodean. Es una de las 4 hormonas de la felicidad. 

Imagina toneladas de oxitocina bañando tu cuerpo y cerebro, impregnando todo tu organismo con una sustancia química que  genera un cosquilleo de placer y bienestar dentro de ti.

Así de potente es Miss o Srta. oxitocina, la también llamada hormona tímida, pues solo aparece y la liberamos cuando nos sentimos realmente en intimidad y conexión.

Conocí la oxitocina hace 12 años atrás cuando comencé a estudiar el proceso del parto. Me pareció formidable que el inicio de la vida tuviera que ver con la expansión, el bienestar y la plenitud.  Descubrir que tenemos el potencial y fuimos diseñados para parir y  nacer impregnados de hormonas del amor y del placer fue una exquisita revelación.

Para poder comprender esto, necesitamos entender y ampliar nuestra mirada respecto a varios puntos.

El PARTO ES PARTE DE LA VIDA SEXUAL DE UNA MUJER

El parto no es un evento médico, sino parte esencial de nuestra vida sexual e intima. Cuando vemos desde esta perspectiva este proceso, damos espacio para poder sentirnos de una manera diferente: más confiadas y conectadas con esta experiencia vital.

DENTRO DE CADA UNA DE NOSOTRAS HAY UNA FARMACIA INTERNA

Nuestra naturaleza humana es completa: dentro de cada una de nosotras existe una farmacia natural, nuestro propio sistema endocrino u hormonal que es capaz de liberar una serie de hormonas o sustancias químicas que nos ayudan a conectar con nosotras mismas, con los demás y sentirnos parte de algo más grande.

EFECTOS PODEROSOS

No es casualidad que la oxitocina esté presente en el parto y nacimiento, tiene una función precisa: ayudar y fortalecer a la madre y al hijo. Por un lado, la liberación de oxitocina tiene una función fisiológica: permite que las contracciones sucedan y el  parto avance fluidamente.

Por otro lado, tienen un efecto directo a nivel cerebral en la madre pues la ayuda a sintonizar y conectar de mejor manera con su hijo y luego a procesar toda la experiencia del parto y nacimiento de manera positiva y satisfactoria. 

En el recién nacido, la liberación de oxitocina le genera calma y bienestar y el efecto de atravesar  las contracciones lo ayuda a terminar de madurar saludablemente y estar preparado para la vida extrauterina. 

Quienes acompañan en el parto, también son influenciados por la hormona del amor, parejas, doulas,matronas  y profesionales de la salud también quedan envueltos en un halo de calor interior y sensación de gratitud profunda.

La oxitocina nos toca en lo profundo del alma porque tiene que ver con el amor, la confianza, el  placer, la complicidad y la fraternidad.

Para entender como liberar oxitocina en el parto, primero veamos algunos momentos de la vida diaria donde somos capaces de producirla naturalmente:

• Durante un encuentro sexual y amoroso
• Durante el orgasmo
• Durante la lactancia materna
• Durante la meditación
• Cuando abrazamos
• Cuando besamos
• Cuando reímos
• Cuando compartimos momentos especiales en familia o amigos
• Cuando le hacemos cariños a nuestras amadas mascotas
• Cuando practicamos yoga o hacemos ejercicios de consciencia corporal
• Al recibir masajes

El hilo conductor de todas las experiencias anteriores descritas es  la conexión, ese tejido invisible que nos une y nos fusiona con la vida y el instante presente.

Te comparto algunas ideas claves de cómo podemos liberar más oxitocina durante el parto:

• Sintiéndose segura y no observada.
• Cuando existe un ambiente de intimidad, pocas personas, las justas y necesarias.
• Cuando no le hablan y le preguntan cosas y hay silencio música suave que a ella le guste.
• Cuando hay luz tenue.
• Cuando recibe apoyo emocional y amoroso de personas que idealmente ella conoce (su pareja, doula, matrona o profesional de salud).

Todas este ambiente está directamente relacionado con las necesidades básicas de la mujer que está de parto, las que están descritas por la ciencia y constituyen la base de la fisiología del parto.

Quienes acompañan el parto también pueden trabajar su propia conexión interior y procurar liberar oxitocina para ayudar a la mujer que está de parto. Esto implica mantener una respiración consciente, escuchar activamente y ser generoso en darle espacio , tiempo y cuidados amorosos a la madre.

Como puedes ver y comprobar en tu propio experiencia, en muchos momentos especiales en la vida de un ser humano la oxitocina nos ayuda a regular el miedo y el estrés .

Al entrar en contacto con los demás activamos la confianza y la empatía y forjamos vínculos emocionales sintiéndonos más conectados y en sintonía.

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